Historia de El Terreno
El Terreno: El primer municipio turístico de la isla
Los ciudadanos adinerados, para quienes el casco antiguo, con sus callejuelas medievales y sus sombríos palacios, se había vuelto demasiado estrecho y opresivo, descubrieron la estrecha colina situada bajo el Castillo de Bellver, con sus verdes pinares, como el lugar ideal para su residencia de verano, con vistas al mar y escaleras que descendían rápidamente hasta la bahía de Can Bàrbara. La zona residencial de nueva construcción, con mucha luz, aire, sol y esplendor de jardines, a sólo unos minutos en coche de caballos del centro de la ciudad, atrajo a residentes adinerados.2
El Terreno - De refugio de artistas a lugar mediterráneo de añoranza
Pronto llegaron los primeros extranjeros, visitantes famosos y estetas que alquilaban apartamentos o casas enteras para pasar el verano. Pintores y escritores como Santiago Rusiñol, Antoni Ribas, Ruben Darío, Gertrude Stein o Cristòfol Vilella descubrieron por sí mismos El Terreno. El barrio se convirtió en un sueño de vida en el sur del Mediterráneo, un anhelo que sigue impulsando cada año a millones de veraneantes a Mallorca y al Mediterráneo.
Los residentes más veteranos conocen hoy muchas anécdotas de aquellos tiempos, como la del Rey Juan Carlos paseando en ciclomotor por las estrechas callejuelas hasta su nidito de amor con su entonces amante. O cómo los tacones de los zapatos negros de Gertrude Stein subían estrepitosamente las escaleras de Bellver.
El Terreno en sus años dorados: de la bohemia internacional al auge del turismo
En los años 30, una variopinta colonia de extranjeros se instaló en El Terreno; británicos, alemanes, franceses, húngaros y estadounidenses se asentaron, fumaron, bailaron, bebieron en los bares y cafés o nadaron en el mar hasta que la Guerra Civil española puso fin abruptamente a la animada dolce vita.
No fue hasta mediados de la década de 1950 cuando empezó a surgir una nueva forma de turismo. Al principio, fueron sobre todo los escandinavos quienes descubrieron por sí mismos El Terreno y Cala Major. Los “suecos”, como se llamaba a los suecos, trajeron consigo muchas divisas.
Entre la decadencia y el renacimiento: la transformación de El Terreno de barrio residencial a moderno distrito de moda
Cada año aumentaba el número de turistas que visitaban Mallorca, lo que desencadenó un boom de la construcción que cambió definitivamente el aspecto del barrio. Se construyeron bloques de hoteles donde antes había villas con jardines en Joan Miró. Una nueva autopista construida en el mar -el actual Paseo Marítimo- separó los acantilados del mar.
Hoy, el barrio experimenta un gran renacimiento. Colegios internacionales y guarderías, la idílica ubicación a los pies del Parque Bellver y la proximidad al centro de la ciudad son únicos.
Para más información sobre la historia del barrio: https://elterrenopalmademallorca.wordpress.com
